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El proceso inflacionario global: Uruguay y el Mundo

El proceso inflacionario global: Uruguay y el Mundo

La inflación era definida por Milton Friedman como una enfermedad de la moneda. Actualmente, nos encontramos en un proceso inflacionario global.

¿La economía mundial está enferma?

La inflación en Uruguay

 
En abril de 2022 la media de la inflación esperada  se sitúa en 9,0% para el año 2022, en 8,6% para el año móvil cerrado en marzo de 2023 y en 8,0% para el año móvil cerrado en marzo de 2024.

La inflación en el Mundo: un proceso global iniciado con la pandemia covid 19

La inflación es una gran preocupación para la economía mundial, una vez transcurridos dos años del inicio de la pandemia.

Hay incrementos de precios que alcanzan máximos históricos en Europa y Estados Unidos y pueden tener contestación desde la política monetaria.

En Latinoamérica, desde el pasado año los bancos centrales están aumentando los tipos de interés. 

El mundo va hacia una aceleración de la inflación no vista en los últimos 40 años. La inflación en los Estados Unidos llegó en diciembre al 7% interanual, récord desde 1982. En la zona euro la inflación alcanzó el 5,1% en enero, máximo desde que existen estadísticas armonizadas, en 1997.

En Latinoamérica la historia inflacionista es diferente, pero se ha acelerado desde comienzos de 2021, pues partiendo de tasas que estaban en un rango del 3-4% en Brasil, México y Chile, nos hemos desplazado hacia el entorno del 10% en el primero y del 7% en los otros dos países.

Una causa es la “inflación de oferta”, derivada de incrementos en los precios de la energía y cuellos de botella en la cadena de suministros globales, relacionado con los cierres de actividades en los períodos de confinamiento en muchos países y, posteriormente, con la recuperación de la economía.

El golpe de gracia: la guerra en Ucrania y el bloqueo a las exportaciones Ucranianas y Rusas, más el congelamiento de la exportación de trigo de la India

La disminución de los productos básicos dispara los precios.

La reducción del suministro de productos básicos provenientes de Rusia como el petróleo, el gas, los metales, el trigo y el maíz, estos dos últimos también provenientes de Ucrania, han disparado sus precios.

La profundización de las sanciones a Rusia limitan aún más el suministro de granos y fertilizantes a los países tercermundistas, lo cual ya representa un riesgo de hambruna global e inestabilidad política y económica.

Como si fuera poco, la India decidió congelar sus exportaciones de trigo, para anticipar un posible desabastecimiento interno (o para disparar el precio de los commodities y venderlos más tarde).

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